Rómpase En Caso De Emergencia.

El otro día estaba viendo un programa en el que dieron tips para sobrevivir en el remoto caso de que caigas dentro de tu auto a un cuerpo de agua profundo. Como en cualquier catástrofe, grande o pequeña, lo primero que uno debe hacer es conservar la calma. BE COOL. No pasa nada. Es sólo un poco de agua. ¿Te has metido a una alberca? Debe ser más o menos lo mismo. ¿No? Sólo que en coche. Si el hundimiento es lento probablemente tengas tiempo de salir por una ventana, aunque puede ser que si tienes sistema eléctrico esté jodido y las ventanas no bajen, sigue conservando la calma.

Bueno bueno, una vez que estés en calma (No es recomendable ninguna técnica de respiración para relajarse en este caso), desabrocha tu cinturón de seguridad (Si no lo usas ya te has ahorrado un paso!! ¡¿Quién dijo que no era benéfico traer el cinturón de seguridad desabrochado?!). Luego ve a la parte trasera en lo que el auto se hunde plácidamente. No dejes que el ruido del agua entrando y de la presión sobre la carrocería te asuste. Es normal en estos casos, no seas chillón. Ok… con la calma encima, con el temor controlado, y de camino a la parte trasera, colócate de tal manera que con la planta de tus pies puedas empujar el medallón trasero del auto, no pierdas tiempo buscando! Medallón es el parabrisas trasero! Colócate en posición y patea fuerte con ambos pies para que el parabrisas bote y seas libre!!

Bueno, eso es una estupidez.

Al entrar en el agua el carro estará unos momentos a flote, lo que te da unos momentos para intentar salir del vehiculo. Si no pudiste salir por las ventanas, puedes intentar abrir la puerta. Si el auto no está muy hundido y tienes la fuerza suficiente quizás la puedas abrir. Hay que tener en mente que la diferencia de presiones entre el interior del auto y el agua es diferente, eso puede impedirte abrir la puerta. Si es el caso: A esperar a que se llene. Una vez que esté lleno y las presiones sean iguales será más fácil abrir la puerta. No gastes oxígeno tratando de romper un vidrio con las manos o los pies. Eso sólo lo hace Van Damme y con vidrios de azúcar. Además el agua va a hacerlo todavía más difícil.

A pesar de todas estas complicaciones la respuesta sigue estando en los cristales. A final de cuentas son el punto más débil de la estructura en la que te encuentras, pero para romperlos hay que golpearlos con un objeto fuerte, y de preferencia un tanto puntiagudo. Es más fácil romperlo si lo golpeas en el centro en vez de tratar de golpearlo en las esquinas.

La cuestión es: ¿De dónde sacas esa madre sólida y puntiaguda? Un martillo puede hacer el trabajo, pero te aseguro que, a menos que estés en un trabajo relacionado a eso, no traes un martillo en la guantera. Un desarmador quizás, pero cuántos pueden golpear con la suficiente fuerza un vidrio para romperlo y librarse, sin mencionar conservar la calma y pensar en ese momento. Pueden intentarlo en casa. Compren un vidrio de auto y traten de romperlo dentro de una tina. Verán que no es tan fácil.

A eso hay que sumarle que parte de los gases emanados por el carro se concentran en la bolsa de aire dentro del carro, que puede salirse aceite u otros líquidos sintéticos que pueden ser respirados o entrar en contacto con los ojos, lo mismo sucede con los pequeños trozos de vidrio que resultan de romper uno de los cristales.

Durante años eh visto en los cristales de los autobuses una leyenda que dice: “En caso de emergencia rompa el vidrio”, ya dejando atrás el caso de hundimiento, y hablando en cualquier caso de accidente o necesidad de romper un vidrio, dudo que se puedan romper “pegándole”. Finalmente los dueños de algunas líneas de transporte han notado eso, vayan a saber ustedes cómo, pero el caso es que han puesto esto:



Hay 6 por autobús, para que no haya pleitos. Simple y efectivo. ¿Cómo no vieron eso antes?, como sea, ¡Ahora el mundo de los autobuses es más seguro! Y recuerden chicos, cuando manejen aléjense de los charcos.

Foto: F.J.Solórzano.